In memoriam Dr. José Luis Bezanilla Regato
Torrelavega, 19 de enero de 2010
El pasado 1 de diciembre fallecía en Bilbao el Dr. José Luis Bezanilla Regato, uno de los pioneros de la Oncología infantil en España.
Nacido en Casto Urdiales en 1928, tras terminar el bachillerato en el colegio San José de los Padres Escolapios de Santander, se trasladó a Madrid para realizar sus estudios de Medicina. En 1953 volvería a Santander para formarse como pediatra al lado del profesor Arce en la Casa de Salud Valdecilla y Jardín de la Infancia. Durante aquellos años conocería a su mujer Antonina Albisua, pediatra como él, madre de sus cinco hijos y compañera fiel y discreta en todas las posteriores etapas de su vida.
En 1956 se trasladó a Estados Unidos para completar su formación pediátrica en Wilmington y en Milwaukee y posteriormente en Chicago, donde entró en contacto con la Oncología Pediátrica. De vuelta en nuestro país, en 1960 se incorporó como médico agregado y encargado del Servicio de Pediatría del hospital de Basurto, para continuar desde 1970 como Jefe de Sección de Pediatría en el Hospital de Cruces y donde llegaría a desempeñar el cargo de Jefe de Servicio de Pediatría desde 1972 hasta su jubilación en 1993. Fue presidente de la Sociedad Vasco-Navarra de Pediatría entre los años 1979 y 1982.
Muchos hemos tenido la fortuna de aprender de su excelente formación y de su buen hacer como pediatra y como oncólogo durante nuestra etapa como residentes, o bien como facultativos en el Servicio de Pediatría del hospital de Cruces. Otros hemos aprendido y compartimos sus conocimientos en las aulas de la Facultad de Medicina de la UPV, o en las múltiples sesiones y ponencias en reuniones científicas en las que participó.
Pionero de la Oncología Pediátrica en España y presidente de la Sociedad Española de Oncología Pediátrica entre 1985 y 1991, el Dr. Bezanilla contribuyó al desarrollo de la especialidad a través del diseño de muchos protocolos para los distintos tumores infantiles y de decenas de publicaciones y comunicaciones en congresos, tanto de ámbito nacional como internacional. En el hospital de Cruces su trabajo de tantos años en favor de los niños con cáncer tuvo su culminación con la inauguración de la Unidad de Oncología Pediátrica en mayo de 1991 y de la que fue su más firme defensor y promotor.Hombre entrañable, disfrutaba de su familia y sobre todo, en los últimos años, de la vitalidad y alegría de sus ocho nietos. Amigo de sus amigos, no perdonaba la reunión anual con sus compañeros de los Escolapios. Tampoco se olvidaba de su querida Santander, a cuyas playas del Sardinero volvía puntualmente cada verano. La Academia de Ciencias Médicas de Cantabria lo había nombrado Socio de Honor. Por encima de su indiscutible valor profesional era un hombre acogedor y cordial, amable en la palabra y en el gesto. Todos los que lo hemos conocido no podremos olvidar su elegancia y su grandeza de corazón.
En nombre de la Junta Directiva, de todos sus compañeros de la SVNP, de sus amigos, y de los pediatras de Cantabria, recordamos con emoción a José Luis. Como gran pediatra, dio lo mejor de sí a sus pequeños pacientes; como amigo, y para todos, tuvo siempre el abrazo entrañable y la sonrisa abierta. Descanse en Paz nuestro querido Dr. Bezanilla.