Pasión por los rallyes

Santander, 12 de mayo de 2011

Falleció el pasado fin de semana Rubén Saiz, un joven con solo 33 años, con toda una vida por recorrer y con muchos proyectos por realizar que ha dejado a medias.

Su vida giraba alrededor de los rallyes, ya que solo con 13 años y acompañado de su padre Toñín, recorría toda la geografía española para poder ver a sus ídolos: su ilusión era poder ser como ellos. No lo consiguió, no fue campeón de España, ni del Mundo, pero con sus modestos vehículos consiguió enseñarnos que no hace falta ser un campeón para destacar.

Pero la verdadera faceta de Rubén era la humana, mucho más destacable. Desarrolló todas los papeles de este deporte, desde aficionado, pasando por colaborador, organizador de pruebas, piloto, presidente y fundador de la escudería Redecam... Su último proyecto no ha podido verlo hecho realidad, un equipo de jóvenes pilotos que empiecen por la base, en los slalom, una de sus verdaderas pasiones.

Tan grande fue su pasión por los rallyes, que su viaje de novios lo realizaron a la isla de Córcega, a rendir homenaje en la curva donde se mató su gran ídolo, Henry Toivonen.

A nosotros nos abandonas, pero queremos consolarnos creyendo que ahora estás al lado de tu gran ídolo y de otros muchos grandes pilotos. Nosotros nunca te olvidaremos, ni a tu esposa Mayte, que supo entender tu pasión, ni a tu hija Elsa, de la que apenas has podido disfrutar.